Además de explorar las propiedades materiales de la tela, al doblar y desdoblarla, ésta se involucra en el proceso pictórico, causándome una pérdida de control sobre la composición y la paleta. Los colores utilizados parten de aquellos encontrados en la pared y se tornan variaciones sutiles de éstos. Así mismo, las arrugas producidas por el empaque de la tela funcionan como una marca para plegar el material.